En el Ayuntamiento de Madrid aseguran que a partir de la próxima Navidad el número de vendedores ambulantes de lotería en las inmediaciones de la Puerta del Sol se limitará, aunque aún está por decidir cómo se llevará a cabo la reducción de loteros callejeros. Mientras tanto, el kilómetro cero de la capital se sigue colapsando de puestos donde se reparte la suerte para estas navidades. Los que no cuentan con permisos municipales reclaman este espacio aduciendo que se están ganando la vida (ingresan dos euros por décimo vendido) o que llevan años haciéndolo. Un reportaje de Antena3 ilustra el tema.
Anteriormente existían unos “carnés de loteros” que otorgaba Loterías del Estado. Con esta acreditación los loteros podían vender los cupones en la vía pública ya que ponían a disposición de sus clientes décimos de administraciones concretas. Sin embargo, debido a una regulación del juego, se dejó de reconocer como válida este tipo de acreditación.
El Ayuntamiento de Madrid otorgó autorizaciones para que únicamente 25 personas pudiesen situarse en la Puerta del Sol y vender lotería. Con el resto de gente que ocupa este lugar, hay cierta “tolerancia”, tal y como afirman desde el Consistorio.
En la anterior legislatura, con Ana Botella, se redactó una normativa para reducir el número de puestos, pero finalmente no se llegó a aprobar.
De momento, no se ha tomado ninguna acción para este año al ser demasiado precipitado. Sin embargo, sí que se aplicarán algunas medidas para preservar la seguridad en la Plaza, un aspecto que preocupa mucho a la alcaldesa. Por ejemplo, los loteros no se podrán colocar en intersecciones ni en las salidas del metro. Además el puesto de cada uno de ellos tendrá que tener unas dimensiones máximas
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